Como decía la canción de Lluís Llach "Mi país es tan pequeño que desde lo alto de un campanario siempre se puede ver el campanario vecino" y el más auténtico Empordà es así. Hay poca distancia entre los diferentes pueblos y una manera divertida y saludable de descubrirlos es haciendo una ruta en bicicleta.
Si no te quieres cansar mucho, puedes utilizar la Burricleta, unas bicicletas de montaña eléctricas desde Peratallada!